Microrelato escrito para bubok.
Pequeñas y saltarinas
No supieron como matarlas, intentaban aplastarlas a manotazos, pero eran tan pequeñas y daban unos saltos tan rápidos e impresionantes, que nunca lograron atraparlas. Todos los que sufrían sus dolorosos e insistentes mordiscos, se volvieron irascibles, se les agrió el carácter, y los demás se apartaban de ellos diciendo: “A esos no les provoquéis que tienen muy malas pulgas.”